devoluci�n de gentilezas
Solo esto que voy a decir ahora, quer�a compartir el honor, o el horror mejor dicho con el camarada Guillebe, que se encuentra por ah� en la ciudad feliz, seguramente persiguiendo almejas, tomando sol en Punta Mogotes o quiz�s hasta cambiando a su novia por fichas de $5 en el casino. Sal�.