Londres, 17 sep (EFE).- Los monos, al igual que la mayoría de los humanos, reconocen cuando les dan "gato por liebre" y además se manifiestan en contra el trato injusto, según un estudio que publica hoy la revista británica "Nature".
Esta investigación observó que los primates saben cuando han recibido un trato injusto porque no han recibido algo del mismo valor que lo que han dado a cambio.
En señal de protesta, dejan de cooperar con sus "jefes humanos" de forma parecida a como lo hace un trabajador que decide ponerse en huelga.
Para elaborar el estudio, los científicos Sarah Brosnan y Frans de Waal, de la Universidad Emory, en Atlanta (EEUU), dieron a dos grupos de monos fichas para que las intercambiaran por comida.
El primer grupo se mostró encantado cuando recibió un trozo de pepino a cambio de una ficha, y un 95 por ciento aceptó el trueque.
Pero, en el segundo grupo de animales, el pepino no fue tan bien aceptado, cuando algunos de los primates vieron como varios de sus compañeros recibían algo mejor, como uvas, a cambio de una ficha exactamente igual.
Sólo un 60 por ciento de los monos del segundo grupo se conformó con el pepino, mientras que el resto, o se guardaba las fichas y se negaba a intercambiar más, o aceptaba el trozo de pepino pero no se lo comía.
Cuando algún mono recibió uvas sin tener que entregar nada a cambio, ni siquiera una ficha, la reacción general fue desastrosa, y sólo un 20 por ciento aceptó el trozo de pepino.
"Comprobamos que los monos comparaban su recompensa con la de sus compañeros y se negaban a aceptar algo de menos valor que lo que recibían otros", explicó Brosnan.
"Esto se acentuaba cuando el compañero no tenía que dar nada a cambio de lo que recibía", añadió.
Brosnan y De Waal concluyeron que el comportamiento de los monos es muy parecido al que tiene un humano cuando cree que ha sido víctima de un trato injusto.
"La gente a menudo renuncia a algo porque no es lo que esperaba o porque cree que no es justo", dijo Brosnan.
Agregó que este comportamiento ha "desconcertado" a científicos y economistas desde siempre, "ya que ellos argumentan que toda decisión económica tiene sentido".
Brosnan afirmó que ahora se puede entender un poco mejor esta reacción humana, ya que el experimento con los primates indica que "el sentimiento visceral de justicia juega un papel primordial en este tipo de decisiones".