Londres, 5 mar (dpa) - Una disputa jurídica ha surgido en GranBretaña en torno a un bebé "con medio rostro": los médicos quierenoperar a esta niña gravemente impedida física, mientras sus padres loconsideran innecesario.

Maria nació hace tres meses en Arabia Saudi, cuando la familia sehallaba de visita en casa de parientes.Fue la única sobreviviente de un parto de trillizos, pero naciócon un raro defecto congénito, el llamado síndrome de Goldenhar: lefaltan el ojo y la oreja derechos, la parte derecha de la nariz y dela mandíbula.Los médicos del hospital de Newcastle, donde la pequeña María seencuentra internada, lograron un primer éxito, al prohibir un juezmediante medida cautelar que el bebé sea llevado a casa por suspadres, poniendo incluso custodia policial a disposición.La madre, Suzanne Taylor, dijo hoy que su hija es perfectamentecapaz de sobrevivir y por ello no necesita en este momento seroperada. "La operación implica riesgos", argumentó. "No puedopermitir que se haga esto a mi hija, a menos que sea estrictamentenecesario".Para que pueda respirar, los médicos de Newcastle planeanperforarle las vías respiratorias. "Estamos obligados a actuar eninterés del bebé", dijo el médico jefe de la clínica, el doctor LenFenwick.Richard Nicholson, editor de una revista británica de éticamédica, ha respaldado la posición de la madre, señalando que el bebésobrevivió un vuelo de Arabia Saudí a Inglaterra, demostrando que laoperación no le es vital, y que ésta sólo pretende facilitar elcuidado de la niña.Es por esto, afirma Nicholson, la separación del bebé de suspadres es dudosamente ética: "Los pedíatras deben tomar enconsideración a toda la familia, no sólo al bebé", dice.