Manaus (Brasil), 21 de marzo (Télam-SNI).- La policía brasileña detuvo a un joven de 23 años, quien asesinó a su madre, cortó el cadáver en pequeños trozos y guardó los restos en la heladera de su casa, informaron fuentes oficiales.Según la policía, el joven confesó el asesinato de su madre de 48 años y dijo que por miedo a las consecuencias decidió despedazar el cuerpo y dejarlo en la heladera hasta saber cómo deshacerse de los restos.
El asesino llegó a denunciar la desaparición de su madre dos días después del crimen, cometido la semana pasada, pero presionado por la policía terminó confesando el hecho.