Varsovia, 7 ago (EFE).- La monja Ludmila, cocinera de la Residencia de los Arzobispos de Cracovia, no ha decidido aún qué menú le preparará a Juan Pablo II cuando visite la ciudad en la peregrinación a Polonia que iniciará el próximo día 16, pero ya ha descartado de antemano el salmón, las coles y las coliflores.
En unas declaraciones a varias emisoras de radio polacas, la religiosa recordó hoy que cocina para los obispos cracovianos desde hace 37 años, y eso significa que lo hizo ya cientos de veces para Karol Wojtyla cuando era arzobispo de Cracovia.
"Nada de coles, nada de coliflores, pero tampoco salmón, porque hoy todos comen y elogian ese pescado, pero a mí me cae muy gordo y no pienso ofrecérselo a Su Santidad", dice la monja cocinera, quien asegura que se tratará de un menú ligero.
"Sé que al Papa le encanta la cabeza de jabalí, pero tampoco se lo daré, porque hoy no hay ninguna charcutería que haga ese embutido tan bueno como antes", añade la hermana Ludmila.
"No espero que el Sumo Pontífice me dé las gracias por lo que le cocine, porque si no lo hacía cuando era arzobispo o cardenal, menos aún lo hará ahora", señaló la monja cocinera.
"Lo que sí puedo garantizar es que la comida que le ofreceré al Santo Padre será casera, porque ésa es la que le gusta de verdad, y con un buen postre, no comprado por ahí, porque detesta los pasteles fabricados en serie, sino, por ejemplo, alguna buena tarta de queso que yo le haré con mil amores", concluye la hermana Ludmila.
Juan Pablo II visitará Polonia entre los próximos días 16 y 19, y durante su estancia consagrará en Cracovia el nuevo santuario mariano de Lagiewniki.