Tegucigalpa, 8 mar (EFE).- Un niño hondureño de 14 años viajó a Miami (EEUU) en un vuelo comercial sin billete ni pasaporte tras burlar los controles de seguridad en el aeropuerto de San Pedro Sula, en el norte de Honduras, informó hoy la prensa de este país.
Martín Fernando Cubas fue detenido por las autoridades del aeropuerto de Miami, que el jueves avisaron del hecho a sus homólogas de San Pedro Sula, que no habían descubierto la acción del adolescente, cuyos padres viven en Estados Unidos.

El incidente ocurrió a pesar de que los controles aeroportuarios se han intensificado después de los atentados terroristas del 11 de septiembre pasado en Estados Unidos.
Cubas abordó un avión de Transportes Aéreos Centroamericanos (TACA) que partió hacia Miami poco antes de la medianoche del miércoles en compañía de una mujer, hasta ahora no identificada, de quien se sospecha que es traficante de inmigrantes ilegales.
Según las investigaciones preliminares, el niño llegó hasta la sala de espera cargando las maletas de la mujer, e ingresó en el avión aunque al parecer no llevaba tarjeta de embarque.
Un primo de Cubas, José Antonio Madrid, de 13 años, también pretendía abordar el avión, pero su actitud sospechosa le delató y fue detenido en la terminal, a pesar de lo cual las autoridades no se enteraron de la salida del primero.
El gerente de TACA en San Pedro Sula, Armando Fúnez, dijo a la prensa que la aerolínea ha abierto "una investigación profunda" para esclarecer el hecho, por el cual "somos los primeros sorprendidos".
Mientras la Dirección de Población y Política Migratoria aduce que el ingreso de Cubas en el avión fue responsabilidad exclusiva de la aerolínea, el gerente del aeropuerto, Carlos Flores, reconoció que hubo "un fallo mínimo" de seguridad.
En 1998, Emilio Domínguez, hondureño de 23 años, llegó a Miami escondido en el tren de aterrizaje de una aeronave de la compañía española Iberia que había salido también de San Pedro Sula.
Por su parte, el niño hondureño Elmer Javier Licona consiguió desplazarse en dos ocasiones desde su país hasta Guadalajara (México), la primera en 1996, con 10 años, y luego en 1997, cuando fue descubierto también entre las ruedas de un avión a punto de partir hacia Los Angeles (EEUU), donde su madre residía ilegalmente.